Brillante victoria del equipo masculino ante el puntero

Banfield superó a UAI Urquiza por 3-1 (19-25,25-21, 25-19 y 25-23) en el Microestadio y le cortó una racha de once partidos invicto.

Con una actuación sólida y regular, el equipo de Claudio Giselli se quedó con un partido trascendental y tiene casi asegurado un lugar entre el segundo y el cuarto en Primera División, lo que determinaría un mejor cruce en playoffs por el ascenso a División de Honor.

El primer set comenzó adverso para los locales, porque la UAI se hizo fuerte y haciendo del bloqueo su principal arma logró sacar una ventaja inicial que mantendría durante el parcial. Banfield no tenía el rendimiento de las últimas jornadas y cuando pudo acercarse un poco en el marcador, los jueces tuvieron un par de fallos muy discutibles que complicaron la recuperación. Entre ellos, fue amonestado Manuel Ceriale cuando la visita ganaba por 21-19 pero Banfield estaba mejor. De allí en adelante, todo fue de la UAI hasta obtener el parcial.

En el segundo fue el Taladro el que saldría decidido a emparejar las cosas y pudo mantener una leve ventaja de tres puntos a lo largo de todo el set. Cuando los visitantes descontaron y se pusieron a uno en 20-19, Claudio Giselli los frenó con un tiempo técnico que sería fundamental. Allí, dos ataques consecutivos de Ceriale y otro más sobre el cierre para definir el set le permitieron al jugador redimirse de su sanción e igualar el partido.

Con el partido empatado, Banfield no se conformó y nuevamente salió a relucir su juego práctico y efectivo, con muchas variantes en ataque producto del buen armado de Asereny y el alto porcentaje de efectividad de los atacantes, que fallaban poco y no le permitían recuperarse a la UAI.

Dos aces seguidos del ingresado Nicolás Dávalos y un bloqueo de Matz cuando promediaba el set sepultaron las ilusiones de la visita y agigantaron la moral del local, que se quedaría con el parcial con mucha autoridad.

Parecía resurgir el actual puntero del campeonato en el cuarto con un 5-0 parcial al inicio pero tres ataques, dos bloqueos y un ace de Nicolás Di Guglielmo, erigido en figura, permitieron reducir ventajas y llegar al cierre con una igualdad que se mantenía en el punto a punto y que a la larga beneficiaría a quien no cometiera errores.

Y fue Banfield el más preciso y el que pudo festejar una victoria que en la previa parecía impensada pero que en el interior del grupo sabían que podían lograr.

La formación inicial del equipo de Giselli estuvo integrada por el armador Ian Asereny, el opuesto Nicolás Di Guglielmo, los centrales Nicolás Matz y Matías Vendramini, los puntas Manuel Ceriale y Matías Garnica y el líbero Rodrigo Coronel.

La mala, Ceriale terminó con una fuerte torcedura de tobillo y será sometido a estudios. La buena, el central Pablo Fita ya está entrenando con el plantel luego de su grave lesión y se espera que llegue a punto para dentro de dos semanas.