El equipo que ya había logrado el histórico ascenso a Primera cayó por 4-2 en la definición del torneo, en un encuentro disputado en el Polideportivo de Almirante Brown.Los dirigidos por Diego Ortega se encontraron con tres rivales en uno. Por un lado, un Racing práctico y efectivo que hizo de la presión y la defensa sus principales virtudes. Por el otro, el complicado suelo del gimnasio que se hacía cada minuto más resbaladizo. Y por último, el poco descanso tras la gran victoria ante Villa Modelo, ya que había sido un partido desempate.
Aún así, el comienzo de la final fue parejo, con Racing marcando hombre a hombre y haciendo un desgaste importante, por lo cual la rotación de jugadores se convirtió en la forma para poder sostener tal ritmo.
Banfield no pudo quebrar el cerrojo impuesto por los de Avellaneda, que a falta de 35 segundos para el cierre de la primera mitad se pusieron en ventaja por intermedio de Ezequiel Martínez.
Pero el Taladro saldría mejor parado a disputar la segunda mitad de un encuentro muy disputado en mitad de cancha y con pocas situaciones claras. A los tres, un gran enganche y remate de Agustín Raigada puso la igualdad en el marcador.
Poco duraría la alegría para Banfield, dado que Gabriel Santos y Sebastián Ariceta en cinco minutos colocaron a Racing arriba por 3-1, diferencia difícil de remontar por como se encerró el equipo de Avellaneda, que encima aumentaría la cifra a falta de tres minutos del cierre, por un tanto de Ignacio Santos.
Así las cosas, para Banfield sólo quedó tiempo para el descuento por intermedio de Eduardo Brissio, en el final de un partido que pese a la caída significó el último del Taladro en Segunda División, gran motivo para festejar.
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